La independencia financiera se puede alcanzar mediante el ahorro y la inversión, 2 términos que van de la mano, ya que el ahorro no tiene sentido sin la inversión y no puede haber inversión sin ahorro. Y es posible que te preguntes, ¿por qué invertir? Tendrás que buscar el motivo por el cual hacerlo, de acuerdo a tus objetivos personales, pero una buena razón es combatir la inflación que cada año reduce el valor de tu dinero ahorrado.

Dicho esto, no importa si ahorras mucho o poco, una herramienta que puede ayudarte a recuperar pequeñas cantidades son la tarjetas de crédito que te ofrecen cashback. Su funcionamiento es sencillo, pagas, y la entidad te devuelve un porcentaje por utilizarla. Estos porcentajes dependen de cada entidad y cuentan con diferentes límites de de devolución mensual, semanal o anual.

Tarjetas con cashback en España

Vamos a analizar algunas de las tarjetas que ofrecen Cashback.

Entidad Nombre de la Tarjeta Comisión que Devuelven Condiciones y Límites
BBVA Cuenta Online Sin Comisiones Hasta 210€ 35€ de devolución durante 6 meses
Openbank Cuenta sin Nómina Hasta un 50% en marcas Sin límite
EVO Tarjeta Inteligente EVO Hasta un 20% en marcas Sin límite
Revolut Tarjeta de pago Metal o Ultra 1% (todos los pagos con tarjeta) 100% de la tasa mensual de la suscripción (15,99€ plan Metal)
ING No especificado 3% Repostar en Shell o Galp
N26 No especificado Hasta un 10% en marcas Sin límite
Plazo No especificado 1%-3% Compras en supermercados, se paga del 1-7 de cada mes. 10€ cada mes.

Estas tarjetas te permiten ahorrar mientras gastas, ya sea mediante cashback (devolución de un porcentaje del importe) o descuentos directos. Recuerda verificar los detalles específicos de cada tarjeta antes de solicitarla. ?

Investigar las comisiones de las tarjetas con cashback

Como veremos al final, hay que tener en cuenta que las tarjetas pueden tener comisiones y gastos asociados que puede que las conviertan en una opción menos interesante para el usuario. Tienes que valorar en cada caso si lo ingresos/gastos se compensan a tu favor. Algunos de estos costes extra pueden ser:

  • Cuota de emisión, mantenimiento o renovación: puede que tengas que pagar al banco al hacerte la tarjeta, por mantenerla operativa o incluso por renovarla una vez haya caducado.
  • Intereses por financiación: si se trata de una tarjeta de crédito, lo más seguro es que la entidad emisora cobre intereses por aplazar pagos o fraccionar las compras que hagas con dicha tarjeta. Muchas veces elegir estas opciones de financiación es la única manera de conseguir los beneficios de devolución de compra.
  • Operaciones no incluidas: puede que tengas que pagar por algunas de las operaciones que hagas con tu tarjeta si no están incluidas de forma gratuita en nuestra tarjeta. Puedes acabar pagando por operaciones como sacar dinero del cajero o hacer transferencias.

Opinión sobre las tarjetas con cashback

Para conocer las cosas es clave investigar, hay que preguntar a gente que las haya usado e incluso probarlas, siempre habiendo leído primeros las condiciones de cada tarjeta. ¿Qué significa esto? Repasar si tienen comisiones, de qué importes, qué limites tienen (cantidades máximas que devuelven, en qué establecimientos, cuándo dan dinero, etc.). 

Tras estas valoraciones se llega fácilmente a una conclusión, son interesantes, incluso útiles, siempre que sean gratuitas y tengas varias ya que podrás acumular el máximo de cashback en cada una a lo largo de 1 año, lo que puede ser una cantidad total muy considerable.

Y, por otro lado, no dejarse llevar por los descuentos, porque al final en lugar de ahorrar un extra con el cashback, puedes acabar gastando de más. 

Elige en función de tus objetivos y de tu estilo de vida, una tarjeta que de caschback en supermercados y combustible es una herramienta muy interesante para cualquiera, por ejemplo.